El experto formador en
competencia digital para menores, Jesús Pernas, explica qué
tipo de ataques reciben las víctimas del acoso en la red y
asegura que los padres y los docentes tienen un papel
fundamental en la lucha contra este problema social que va en
aumento con la ayuda de las tecnologías de la información.
Publicado:
28.01.2016
Acoso
digital./REUTERS
MADRID.-
"No aguanto ir al colegio y no hay otra manera de no
ir". Así se despedía Diego, el niño de 11 años que se suicidó
el pasado 14 de octubre en una carta a sus padres al no
aguantar más la situación que sufría en el aula cada día. Es
uno de los casos más dramáticos que hemos conocido, pero no es
el único.
El acoso escolar siempre ha existido y
en la actualidad es un problema social que va a más ya que las
víctimas sufren ataques de manera física, pero también a
través de Internet o del teléfono.
El experto formador en competencia
digital para menores, Jesús Pernas, de la Asociación NACE (No
al Acoso Escolar) señala que las tecnologías son una
herramienta maravillosa para los jóvenes, pero que necesitan
aprender a usarlas de una manera sensata para evitar estos
casos de acoso y saber cómo actuar.
Pernas,
también creador del proyecto 'Acompáñame en la red' dedicado a
guiar a los menores en su desarrollo digital de forma segura,
asegura que es importante desvirtualizar la red, para que los
jóvenes entiendan que no deberían creerse ni los halagos ni
los insultos, y que aprendan a resolver conflictos.
Los padres y los docentes, insiste,
tienen que ser modelos a seguir, y para ello propone cursos de
capacitación digital para éstos y que se lleve a cabo una
reforma en la educación para luchar contra este problema
social que cada vez más acaba con las vidas de muchas
víctimas.
P. ¿Qué
es el ciberbullying?
Yo no
hablo de bullying, intento evitar los términos anglosajones y
llamarlo violencia digital. Para dar una definición oficial,
nos tenemos que ir a la reforma del Código Penal del 31 de
marzo del 2015, en la que el acoso ya se ha tipificado como
delito. La mejor definición, en mi opinión es esa. Y es que a
través las tecnologías de la información alguien contacte con
un menor para llevar a cabo algún tipo de acoso, y no implica
injuria o algún tipo de insulto, sino simplemente hacer sentir
mal a la víctima.
Yo hablo de violencia digital y la
entiendo como cualquiera de las maneras de agredir, ya sea a
través de insultos, hostigamiento, o de phishing (que es
hacerse pasar por otra persona con un perfil falso), es decir,
cualquier cosa que provoque un daño en la víctima, vulnerar
sus derechos o su desarrollo evolutivo, emocional y
psicológica.
Hay una diferencia entre lo que
conocemos como acoso "tradicional" y el acoso digital que se
manifiesta en cualquiera de las plataformas digitales. Hay una
única similitud que es hacer sentir mal a una víctima, ya sea
de forma individual o en grupo.
¿El 'sexting'
se considera un tipo de violencia digital?
Sí. Hay
dos tipos: uno tiene un objetivo sexual y el otro, uno
económico (chantaje). Se trata de difundir imágenes de
carácter sexual de una persona sin su consentimiento. Cuando
hablo de consentimiento, quiero recalcar una cosa, que es la
edad legal para el acceso a las plataformas. En Facebook hasta
los 14 años no puedes publicar la imagen de nadie, ni siquiera
de tus propios hijos. Con lo cual muchos ya van en contra de
las normas.
Se considera sexting cuando la
distribución de las imágenes de carácter sexual es entre
iguales, ya sea entre adultos o menores. Yo lo llamo violencia
sexual digital.
Europa propone elevar de 13 a 16 años la edad mínima para usar
servicios como las redes sociales. ¿Cómo cree que afectaría
este cambio?
Yo me
pregunto '¿Para qué? ¿servirá de algo realmente?'.
Psicológicamente, lo primero que hace un menor cuando entra en
una red social es mentir, porque miente sobre su edad. Desde
mi experiencia, considero que desde le damos una tablet a un
niño de 2 años ya está conectado. La conexión es inevitable.
¿A qué edad deberían, en su opinión,
tener teléfono móvil los niños? ¿Qué tipo de control deberían
emplear los padres y profesores en su uso?
Aquí
quiero hablar de una idea que llamo "Niño-terraza-frente". Lo
explico: Cuando hace buen tiempo, los que tenemos hijos,
salimos a tomar el vermut con los niños pequeños alrededor, y
para que nos dejen hablar tranquilamente les dejamos el móvil
para entretenerlos. En el móvil hay redes sociales, y los
juegos a los que juegan normalmente son parte de estas redes,
por lo que ya están conectados. ¿No te has fijado nunca en
cómo se sientan con el móvil? Se ponen con la frente en la
mesa y el móvil por debajo porque no ven con el sol y no saben
subir la iluminación de la pantalla. Por lo tanto, ¿cuál es la
edad de inversión digital? ¿tres, cuatro, cinco años..? Les
entregamos una tecnología sin explicarles cómo usarlo.
La
tecnología les llega de sus padres que son su referencia de
seguridad. Por eso el papel de los padres es fundamental.
Tenemos que ser modelos, enseñarles un buen uso del tiempo,
normas para saber cuándo pueden usar estos dispositivos y
cuándo no. Tenemos que estar permanentemente atentos a cómo
están y cómo se sienten.
Pero
si muchos padres desconocen estas tecnologías, ¿cómo van a
controlarles y enseñarles a hacer un buen uso de las redes?
Hay que
formarse, es vital. No se trata de ser amigos de nuestros
hijos en las redes. Mi madre no vendría a la discoteca conmigo
de joven, hay que respetar su intimidad. Pero es importante
saber lo que está pasando, por su seguridad. Hay que dialogar
muchísimo. Ser modelo y enseñarles a resolver conflictos.
Cuando mi hijo no quiere ir al
instituto, no quiere abrir el móvil, no entra en sus redes
sociales, algo está fallando. Si los juzgamos y no le damos la
importancia suficiente, nunca van a confiar en nosotros.
Nuestra debilidad (la falta de conocimiento tecnológico) no
tiene que ser un problema para nuestros hijos. Sí sabemos
resolver un conflicto, también sabemos que la amistad es
incondicional, sabemos empatizar con los demás, tenemos que
enseñarles que sean exquisitos a la hora de tratar con los
demás.
P. ¿El anonimato en la red da carta blanca a los acosadores?
El anonimato como tal no existe, se
puede terminar localizando al acosador. Con la Deep Web
(Internet Profunda) sí se ha conseguido el anonimato total, y
ahí es casi imposible localizar a la persona. En ese caso hay
que trabajar con la persona que está recibiendo el acoso.
Hay una forma de acoso que se utiliza
mucho ahora. Si un grupo de 50 personas se pone de acuerdo en
bloquear a una persona a la vez, le borran la cuenta de
WhatsApp. ¡Imagínate que a un chaval le borren la cuenta! Es
un acoso por exclusión.
Otro tipo es a través de la
geolocalización. Casi todos vinculamos el móvil a nuestro
email y algunos son capaces de tener localizada a la víctima:
"Ya estás saliendo del cine, te vamos a cortar el cuello", es
un mensaje que recibió uno de los jóvenes con los que trabajo.
¿Existen mecanismos suficientes para identificar el acoso
escolar y atajarlo?
Estamos
intentando instaurar protocolos de acoso en el ámbito digital
y no tiene nada que ver. El "de siempre" tiene una intención
dañina. Sin embargo, la mayoría de los casos en el mundo
digital empiezan como un juego. La nueva pandilla está en
Instagram y en WhatsApp. La intención dañina pasa, primero, a
ser una intención de juego, y luego ya se va agravando. En el
acoso tradicional, hay una presencia física. En la digital a
veces ni se conoce al acosador. El acoso tradicional duraba lo
que duraba la agresión, aquí no acaba nunca, los vídeos no
paran de salir y todo el mundo lo conserva, por lo que hay una
sensación de que vuelve a ocurrir una y otra vez. Es
permanente.
Tenemos que estar atentos y ver qué
siente el menor cuando apaga el móvil. El desarrollo social y
emocional del menor se ve afectado tanto en el acoso
tradicional como en el digital, van de la mano.
En 'Acompáñanos en la red' lo que
intento es que aprendan a proteger su espacio. Cogemos al
administrador de un grupo de WhatsApp y hacemos un tipo de
juramento, como un juego. Se trata de conquistarle y no
juzgarle. Lo que hago es que jure que será firme con las
normas, por ejemplo: "juro solemnemente que en este grupo no
se insultará, y si alguien insulta, se le eliminará del
grupo". Parece que el hecho de tener WhatsApp ya permite que
te puedan insultar.
¿Cómo de eficaz ve el número de teléfono que se propone para
el acoso escolar, al estilo del 016 para la violencia de
género?
Estamos
en tal situación que cualquier recurso que sirve para ayudar
vale. Pero hay un problema, es una forma de calmar la
conciencia social con un "estamos haciendo cosas", pero hacer
un cambio profundo en el sistema educativo, en la forma de
enseñar a los menores, nos va a liberar de esta carga.
Las víctimas se ven muy solos y con
miedo, tener un recurso accesible a esto es positivo, pero
simplemente lo veo como una declaración de intenciones que
tiene que ser mucho más grande. ¿Quién va a calmar a ese niño
que llama para que pueda ir al cole al día siguiente? No
podemos darle una calma instantánea.
Toda iniciativa siempre es buena pero
vamos a coger el problema y meterlo de forma curricular.
Quienes tienen que tomar protagonismo en esto son los
familiares y los docentes. Propongo hacer un curso de
capacitación digital desde la repercusión emocional que tiene
en los menores, no desde la herramienta. El acoso no necesita
intervención, necesita prevención. A los menores hay que
ofrecerles una educación preventiva, desde los valores de la
amistad sin condiciones o manipulaciones.
¿Qué
consejos daría a un joven que sufre este tipo de acoso?
Lo que
está claro es que el 40 - 45% del futuro laboral de estos
jóvenes están en puestos que no se han ni inventado todavía y
todos relacionados con tecnología, ¿cómo le vas a separar de
la tecnología?
El acoso es un problema social. Las
claves son la educación y la capacitación tecnológica. Cuando
entienden la maravillosa dimensión que tiene la red para
cumplir sus sueños no se preocupan en perder el tiempo en
machacar a otros.
Pocas veces se soluciona un conflicto
en la red, por lo que hay que desvirtualizarlo. Yo imprimo las
discusiones y cuando lo leen en un folio muchas veces ni se lo
creen. No hay que creerse ni los halagos ni los insultos. Ser
uno mismo, no dejarse llevar por el miedo. Poner límites.
Saber decir "no te permito esto". Saber salir del grupo de
whatsapp cuando no te gusta. Tenemos que crear chavales
capaces.
Es importante también trabajar con las
mujeres para que entiendan que la belleza viene de dentro,
para que no se dejen llevar por los primeros cuatro o cinco
que le den un 'me gusta'. Que no se lo crean, nadie puede
decirte que eres la más bonita del mundo si no te conocen.