“LO ESTOY PASANDO FATAL”

CARTA A PRODENI DE UNA ALUMNA DE 3º DE ESO (BARCELONA) QUE DENUNCIA ACOSO Y AGRESIÓN ESCOLAR

Me llamo... y acabo de cumplir 16 años, pido ayuda a la Asociación Prodeni, ya que no puedo más, he hecho todo y más, pero veo que no tengo ninguna salida, lo estoy pasando fatal. Os explico como empezó esta horrible pesadilla:

Yo fuí a la E.P de B. (un centro privado concertado) pensando que era un buen colegio y estaba cerca de casa, por eso me cambié y me equivoqué por lo que me está pasando y estoy sufriendo un verdadero infierno. El primer día, 13 de septiembre, tenía que ir al colegio, pero no pude ir ya que a mi madre la habían operado y estaba muy preocupada. Cuando mi madre ya se encontró mejor, yo ya fuí normal, como cualquier niño, al colegio. Empecé el dia 19 de Septiembre.Todo iba bien, pero al cabo de unos días ya empezaron los mismos chicos que me iban detrás a decirme PAYASO por mi forma de vestir, PIJA. Lo peor de todo que me estaban machacando y torturando todo el santo día,sólo porque vestía clásica en lugar de como ellos les gusta. Me encontraba muy sola ante el peligro, ningún profesor me ayudaba. Por las noche no puedo dormir debido a lo que ha sucedido y está sucediendo no logro salir de esta horrible pesadilla a veces pienso que no es posible tanta maldad en la sociedad, no saben lo mal que yo lo pasaba cuando se metían diciéndome que era ERA UNA SEÑORA DE 60 AÑOS, y los niños me enviaban notitas diciéndome QUIERES FOLLAR CONMIGO Y COSAS ASÍ, era horrible. Eso aún se podía consentir, pero resulta que yo iba con las que eran mis amigas que son de 4º de ESO. Yo me iba con ellas al patio.

Ese día lo recordaré toda mi vida y me arrepentiré siempre de no haber estado en mi patio con los de 3º de ESO, porque ese día llevaba una falda por las rodillas y unos niños de 4º de ESO me hicieron una foto con el móvil por debajo de la falda (entre la entrepierna). Me di cuenta porque una amiga me avisó. El chico cogió e hizo ver que se le caían las llaves, pero no fue así. Yo al darme cuenta me cogí la falda, pero él ya me había hecho la foto. Yo a ese chico no lo conocía de nada, pero entre todos los de 4º de ESO decían "MIRA QUE BRAGAS LLEVA". Así, que yo pude ver la foto, y le dije que la sacara por favor. El chico riéndose me intentaba hacer más fotos y yo me cogí la falda y le dije que me dejara en paz. Había una profesora y le comenté lo que me estaba pasando y no me quiso ni escuchar ( me dijo gritando) que me fuera a mi patio, yo lo hice, pero seguidamente un niño me dijo "TIA BUENA, PERO DE LOS AÑOS 60", "VIEJA", así que me sentó fatal y le dije "cara huevo" dejame en paz, y me fui a mi patio al de 3º de ESO. Al llegar a mi patio estuve con las de mi clase que son un sol de niñas, así que me estuve con ellas llorando. El chico que le había dicho CARA HUEVO, que era de 4º de ESO, vino a mi patio y cuando lo vi me cogí a mi amiga del brazo y me vino él corriendo y me dijo: niña (pero gritando) y le dije que me dejara, así que cuando me giré me dio un manotazo en toda la cara y bastante fuerte. Del shock que me pasó me puse a llorar y el niño me dijo que esto continuaría fuera. Los professores lo vieron y no hicieron nada sino que me hicieron hacer un examen de Matemáticas en las condiciones las cuales estaba. La profesora de Matemáticas cuando acabé el examen, me dijo delante de todos los alumnos "¿has visto lo que has hecho, no vuelvas nunca más al patio de cuarto"?.

YO TENÍA MUCHO MIEDO y huí por las escaleras a telefonear a mi madre, le comenté lo que me pasaba, así que mi madre fué corriendo al colegio, estaban los niños por ahí y dijeron "MIRA LA NIÑA, QUE NO SE SABE DEFENDER SOLA, SINO QUE TIENE QUE VENIR SU MAMÁ". INTENTARON PROVOCARNOS, pero mi madre se fué dentro y no hizo ni caso. Mi madre dijo que quería hablar con el responsable (director, tutor...alguien). Nos dijo el conserje que no había nadie, pero resulta que yo vi a mi tutor y le dije a mi madre , fué corriendo hacía él y le dijo a mi madre que no denunciáramos que no pasaba nada, pero yo no podia más, estaba amenazada, insultos y hasta el punto que me pegaron, que no me pegan mis padres, para que me venga un niño a pegarme sin ningún motivo. Así que mi madre decidió ir a poner una denuncia ya que no hacían nada, porque antes de que pasara este episodio anteriormete como os he contado no paraban y así hicimos. Al dia siguiente fuí al colegio normal como cualquier día, pero por desgracia no fué así, fué peor que el otro día. Estaba temblando cuando entré en el colegio y, ese día todo el mundo se burlaba de mí como cualquier día, así que ya era normal para mí, pero ya no pude más cuando me dijeron que "pasarían por encima de mi cadaver". El amigo del chico que me pegó a la hora del patio me esperaba para pegarme por el pasillo. No lo sabeis como lo pasé, fue horrible.

Un profesor que estaba en el patio y mis amigas de clase me dijeron de pasar por otro piso, que no tendríamos que pasar por delante de ellos y les pillamos con las manos en la masa, que se dice, pero después me vino una amiga y me dijo que ella estaba amenazada de que la pegarían porque no sé como se enteraron de que yo habia denunciado y ella hacía de testigo. Mi tutor y la Jefa de Estudios me llevaron al despacho y me dijeron "ESTAS NO SON FORMAS DE ACTUAR, NO TENIAS QUE HABER DENUNCIADO A ESTE CHICO, PORQUE SE PODIA HABER SOLUCIONADO HABLANDO, Y ADEMÁS TÚ TE HAS SALTADO LAS NORMAS YA QUE HAS IDO AL PATIO DE 4º DE ESO, QUE NO TE CORRESPONDE", todo ello con una actitud de represión. Y la jefa de estudios, ha continuado diciéndome " ¿QUÉ ,YA TE SIENTES MAS SEGURA POR HABER LLAMADO A LA POLICIA? LA POLICIA TIENE OTRAS COSAS QUE HACER, NO VA A HACER NADA CON TU DENUNCIA". MIENTRAS MI TUTOR SE REÍA, Y YO LE HE DICHO QUE TENIA MIEDO, POR LO QUE ME ESTABA OCURRIENDO Y QUE TEMIA QUE TANTO EN EL COLEGIO, COMO FUERA DE ESTE, ME PUDIERAN HACER ALGO MAS GRAVE, y la jefa de estudios me ha dicho, que ya que había hecho la denuncia el colegio no se hacía responsable de lo que pudiera ocurrir, y que me atuviera a las consecuencias. Al salir del despacho todos se estaban riendo a carcajada limpia de mí, burlándose, hasta señalándome. Así que me tocaba educación física, el profesor me dejó salir media hora antes para que no me hicieran nada porque él lo había visto todo y me fui corriendo hacia mi casa. A la 13.30 cuando salían todos le dije a mi amiga que me explicara lo que ocurría y así era, me estaban esperando. Le comenté a mi madre lo que ocurría y como nadie se quería hacer responsable nos fuimos al centro de enseñanza a hablar con el inspector de zona, y nunca estaba. Intentábamos ir y nos decían que estaba ocupado. Nos decían un día, venimos y no está. Así que una chica nos dice que redactemos lo que nos está pasando y lo entreguemos a Enséñamen, aún es la hora que nos digan algo, no nos han contestado.

El Inspector nos recibió en Noviembre, imagínense, para encontrar un colegio, porque sin la firma de ello no nos daban ningún colegio. Anteriormente a esto, nos fuimos a hablar con el director regional de las E.P. y NOS DIJO QUE TODO SE HABÍA SOLUCIONADO Y QUE NO PASABA NADA, ASÍ QUE YO COMO SI NO HUBIERA PASADO NADA Y FUI AL COLEGIO. Resulta que fui y nada, todo era mentira los niños me rompieron los pantalones (al salir del cole ) y me robaron la carpeta del cole y unos libros que una amiga mía después al cabo de dos semanas, vi esa carpeta, que la tenía otra niña, y los libros aún es hora que aparezcan. Los insultos seguían hasta me dijeron que me perseguirían para saber donde vivo y pegarme, así que no vimos otra solución que cambiar de cole pero por lo que iba, nos lo firmó y nos fuimos a la calle Bruc para que nos dieran un colegio y me pensaba que el responsable me ayudaría pero no fue así. Me dijo que yo era una niña problemática y que claro los colegios no me querrían porque he repetido dos veces y que tuviera cuidado con lo que hacía, hasta que nos vio llorar a mí y a mi madre no paró, hasta el final. Si no nos callábamos y no escuchábamos todas las impertinencias y agresiones psicológicas que nos estaba haciendo no nos daría la hoja para el cambio de colegio. Conseguimos la carta pensando que todo saldría bien y que iría a un colegio, pues nada, el colegio no me quiere aceptar y me manda a un colegio que no nos podemos permitir el lujo de pagarlo, ya que mi madre es divorciada y no le llega para pagar esto que son 560 euros al mes y de entrada 1.500 euros, así que nada, no podemos pagarlo y me tengo que ir  a la E.P. para que me peguen. Lo único que sé es que me están destrozando psicológicamente y no puedo más.

Espero y confío en vosotros en que me ayudéis porque no puedo más. Lo único que quiero es un colegio no pido nada de especial, es que todo el mundo me cierra las puertas y llega un momento que lo ves todo tan negro que hasta te piensas que tu eres la culpable que has hecho algo. Gracias, por lo menos, por escucharme que para mí esto es mucho.

SITUACIÓN

Este uno de los últimos sucesos de acoso escolar en España. La víctima nos llamó desde Barcelona y nos contó su lamentable historia por teléfono y más tarde a través del correo electrónico. Hemos hablado varias veces con ella y con su madre y las hemos aconsejado y apoyado psicológicamente. Dejó de ir al colegio donde la acosaban el 18 de Octubre de 2.004 y casi dos meses después se incorporó al nuevo colegio (9 de Diciembre) debido a las dificultades, primero, de la Administración Educativa y, segundo, de  la dirección del colegio donde se ha incorporado. Nos dice que el cambio ha sido para ella extraordinariamente positivo. Sus nuevos compañeros y compañeras la han acogido muy bien, lo mismo que el profesorado. 

Hay que decir que a consecuencia de los acosos, amenazas y agresiones,  la menor llegó incluso a pensar en el suicidio. En un momento dado tenía pensado la forma y el lugar, pero gracias a la intervención de su madre fue asistida por un psiquiatra y un  psicólogo y está empezando a salir adelante. 

En el informe médico del Psiquiatra Jordi Domingo Ribas, del Instituto N.E.P.P. S.L. de Barcelona, con relación a esta menor (27 de Noviembre 2.004) leemos que sufre:

Tristeza, pérdida de interés por las cosas, abulia, inquietud, apatía, anhedonia, ánimo depresivo, ansiedad flotante, inquietud, irritabilidad de carácter, somatizaciones diversas e insomnio, precisando tratamiento farmacológico: ansiolíticos y antidepresivos. Y psicológicamente terapia individual de apoyo.

Por su parte, María Serrahima i Sugrañes,  Directora de los Servicios Territoriales de Educación de Barcelona Ciudad, de la Generalitat de Catalunya, en un escrito dirigido a la madre con fecha 15 de Noviembre de 2.004, quitó importancia a lo ocurrido haciendo suya la versión del Director del  centro educativo, según la cual lo que la madre ha calificado como “agresión y acoso” de alumnos contra su hija, no ha sido más que un desagradable “incidente de patio”, asunto a tratar como tema de educación, orientación y acción tutorial, negando que se haya producido cualquier acto de persecución  de un grupo de alumnos contra la menor.  Por lo mismo (sigue diciendo en su escrito) espera que la alumna se reintegre de inmediato al centro, recordando a la madre su responsabilidad si no lo hace al estar en edad de escolarización obligatoria.

Evidentemente la alumna no volvió al centro y la Administración Educativa modificó su postura facilitando el cambio a otro. Estuvo casi dos meses sin escolarizar.

La Sección de Menores de la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya ha abierto expediente contra dos alumnos por una denuncia interpuesta por la madre de la menor, todavía sin resolver.

Como observamos aquí y prácticamente en cada uno de los hechos similares de los que tenemos conocimiento, al sistema educativo le cuesta un enorme esfuerzo ponerse en la piel de los alumnos que denuncian acoso y agresión, minimizando cuantas veces pueden los graves incidentes que casi podríamos decir “asolan” nuestros centros de secundaria a lo largo y ancho del país. Así no vamos a dar nunca con la solución a este grave problema.

Decimos que todas y cada una de las historias que en los últimos meses venimos conociendo de violencia escolar entre alumnos están cortadas por el mismo patrón: Los profesores no se enteran y la autoridad educativa no quiere enterarse. Así sucedió con Jokin, el pobre chico vasco, y sucede día tras día con cada uno de los casos que llegan a la opinión pública. Y ese “no es para tanto”, o “sólo son desagradables incidentes de patio”, o simple “exageración de las víctimas...” con lo que suele responderse a cada denuncia, es un grave insulto a la dignidad y los derechos de quien lo padece y de sus familiares. Pero hay más.

¿Cuál es el efecto de semejante irresponsabilidad institucional?. Pues, no sólo que los menores acosados queden en el más absoluto desamparo en el sistema educativo, si no que los acosadores gozen de total impunidad, sabiéndose “protegidos” por quienes no quieren ver o prefieren miran para otro lado, pretendiendo que el lodo que se va extendiendo en el interior del sistema no manche el honor y el buen nombre de la institución (unos, el del centro en sí, y otros, su imagen de políticos eficientes). Y ya va siendo hora de que en este país la autoridad educativa central y las de cada una de las comunidades autónomas, asuman que la violencia escolar es un asunto muy serio que cada vez está afectando a más alumnos.