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La Voz de Galicia

Galicia

Los colegios podrán crear grupos para apoyar a las víctimas de acoso

Es una de las medidas recogidas en el protocolo que se aplica este curso

 

Familia de un niño que denunció abusos este año en Vigo. m. moralejo

La Consellería de Educación remitió a finales del pasado curso un protocolo de acoso y ciberacoso a todos los centros educativos. Se trata de un documento básico que cada colegio e instituto puede adaptar y ampliar y que será de aplicación para todos aquellos centros sostenidos con fondos públicos, es decir, públicos y concertados. Una de las principales novedades que ya se dio a conocer en la presentación del protocolo es que cuando se detecte un caso de acoso escolar, la resolución del expediente disciplinario debe resolverse en un máximo de doce días. La lentitud de estos procedimientos era una de las principales críticas de los docentes, ya que muchas veces la sanción llegaba finalizado el curso.

Pero hay más. En el documento se recoge una descripción de las situaciones que constituyen el acoso, las medidas urgentes que pueden tomarse y las fases a seguir. Dentro de las medidas de protección a la víctima que pueden adoptar los centros figuran la reorganización del horario del profesorado para poder atender mejor al alumno afectado, o la organización de grupos de ayuda entre iguales, es decir, entre los propios alumnos, que tras recibir una formación previa acompañen a la víctima, sobre todo en los momentos en los que esta puede sentirse más indefensa como son la entrada y la salida del centro, los pasillos, o los períodos de descanso.

El protocolo establece que desde un primer momento se nombre a una persona responsable de atención y apoyo a la presunta víctima, que preferiblemente ha de ser alguien con quien la víctima tenga una relación de confianza y proximidad. Los colegios podrán además tomar medidas cautelares inmediatas que impidan el contacto entre acosador y acosado. El protocolo establece cuatro fases para desarrollar cuando se detecte un caso: conocimiento de la situación, identificación y comunicación; recogida de información; análisis y adopción de medidas; y finalmente seguimiento, evaluación de estas medidas y registro.

Cuando se constate, ya en la tercera fase, que efectivamente hay una situación de acoso escolar por parte de uno o de varios alumnos hacia otro, habrá que abrir un expediente disciplinario que incluye varias medidas correctoras.

 

De tareas a cambio de centro

Estas sanciones se aplicarán en relación a la gravedad de las conductas y las edades de los agresores, e incluyen desde la realización de tareas dentro o fuera del horario lectivo, o la suspensión del derecho de asistencia a determinadas clases hasta un máximo de dos semanas, a la suspensión de asistencia al centro un máximo de un mes, o incluso el cambio de colegio o instituto.

 

Cómo detectar el acoso

¿Cómo detectar una situación de acoso si no la denuncia el propio menor? Hay síntomas, actitudes o comentarios que dejan entrever que algo no va bien. Por ejemplo, si la víctima descuida su aspecto físico, busca acompañarse de personas adultas, abandona actividades que antes le interesaban sin una razón aparente, o cambia los horarios de llegada y salida del centro educativo.

Pero el protocolo incluye además síntomas físicos, como son el nerviosismo repentino, el cambio en las rutinas de alimentación, vómitos o dolores, actuaciones agresivas o malas contestaciones a los propios hermanos o familiares. Síntomas que esconden situaciones que deben atajarse desde un primer momento.

 

NOTA DE PRODENI

La Consellería del ramo en Galicia dispone en su protocolo contra el acoso escolar, entre otras medidas, que grupos de apoyo entre alumnos ayuden a las víctimas. El protocolo gallego contra el acoso escolar llevaba dos años esperando en el cajón de la Consellería y no salió a relucir hasta que sucedió lo del caso del niño de Vigo en los dos últimos meses del curso pasado, cuando a pesar de que el Conselleiro, el ínclito Xesús Vázquez Abad, negase el acoso del chaval, y el pan y la sal de su ingreso en otro colegio, lo anunciase a bombo platillo sin explicar la injustificada demora. Bienvenido sea pero a buenas horas mangas verdes para el alumno vigués con quien el Conselleiro mostró tan escasa sensibilidad como prepotencia.