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PIEDAD, LA CASA CUNA Y EL PEDERASTA

PRODENI   

jueves, 01 de julio de 2010, Diario canarias24horas.com

Aún estando bajo investigación judicial, los datos que aparecen sobre el supuesto educador pederasta de la Casa Cuna de Santa Cruz de Tenerife que ha venido actuando durante casi dos décadas con total impunidad, puede convulsionar los pilares del sistema canario de protección de menores, porque la Casa Cuna de Santa Cruz de Tenerife es una institución emblemática donde parece que se han cometido los abusos contra menores bajo su custodia.

PIEDAD ha estado en ese mismo centro y la asociación PRODENI realizó un informe del maltrato institucional sufrido por la menor en manos del Ministerio Fiscal desde hace 5 meses. La menor entró allí un 10 de mayo de 2007 permaneciendo varios meses hasta que fue entregada a la parte biológica y posteriormente volvió a un centro de menores en el que lleva casi dos años.

PRODENI denuncia en su informe la existencia de indicios, sospechas, y hasta evidencias de irregularidades, como por ejemplo la perversa aplicación de técnicas de reestructuracción cognitiva para amputar sus afectos y colocarla en disposición de enfrentarse a la nueva realidad familiar que la autoridad judicial había dispuesto. Era una niña normalizada que entró en un centro de protección y allí sufrió la tortura del aislamiento, incomunicación, siendo dejada de lado, pasando los educadores de su problema personal, importando poco sus llantos convulsivos, su desazón y sus angustias.

Ahora sabemos, por la denuncia contra el supuesto pederasta, que otros menores del mismo centro sufren igual tipo de trato: se les ignora y no se les escucha, pues además del dato aportado de que una de las víctimas "estaba sentada sola en un rincón del patio, no hablaba con nadie y nadie se preguntó qué le pasaba", o de este otro: "a finales de mayo pasado las víctimas del centro comenzaron a tener sesiones psicológicas, pero la denuncia se formuló 4 meses antes", resulta incomprensible que nadie nunca observara nada ni siquiera indicios de lo que allí estaba sucediendo, lo que más bien indica que lo que pasó es que más de uno miró para otro lado negándose a escuchar las señales que consciente o inconscientemente los menores emitían, pues no existe explicación a tanta impunidad a lo largo de casi 20 años.

La Administracción (Cabildo, Gobierno canario, Fiscalía...) podrá decir lo que quieran, pero lo que no pueden negar es que esos crímenes contra los derechos del niño se producen también en los lugares destinados para protegerlos y al igual que el Vaticano ha tenido que reconocer su propia vergüenza de abusos contra los niños, tiene el Gobierno de Canarias que reconocer que los menores tutelados están a merced de algunos pederastas, sádicos, y otros especímenes bajo la cobertura oficial de técnicos y educadores, que a lo que se ve campan por sus respetos, hacen de su capa un sayo, y gozan de un elevado nivel de protección e impunidad, hasta el punto de resultar realmente difícil denunciar cada caso si no existen pruebas contundentes.

PIEDAD sufrió maltrato en su paso por la Casa Cuna, y antes y después de ella otros niños lo han venido sufriendo. La denuncia acredita la total soledad e indefensión de los menores ante la actuación de cualquier depredador o maltratador . No hablemos de hechos puntuales, de casos aislados, es un mal estructural, en el que Protección de Menores, los Cabildos y la Fiscalía se llevan la palma por su demostrada ineptitud e ineficacia.

 

J.L.CALVO
PORTAVOZ DE PRODENI