Un
tribunal chileno declaró este miércoles al sacerdote de los
Legionarios de Cristo John
O'Reilly culpable del delito de abuso sexual
reiterado contra una menor de edad, en el colegio de esa
congregación donde la menor estudiaba.
El
Tercer Tribunal Oral en lo Penal de Santiago resolvió por
mayoría recoger las acusaciones en contra de O'Reilley, un
sacerdote de origen irlandés con varias décadas de
residencia en Chile, aunque
desestimó, por falta de pruebas, otras planteadas por
supuestos abusos a una hermana de la víctima.
Asimismo, acogió la demanda civil presentada por el
querellante.
Durante
el juicio, que comenzó el pasado 1 de agosto, se dio a
conocer un centenar de pruebas, entre ellas testigos,
peritos y la declaración de las dos hermanas, presuntas
víctimas del religioso en el colegio "Cumbres", situado en
un sector rico de la capital chilena.
Según
la acusación del Ministerio Público, que acogió la corte, el
religioso aprovechándose de su condición de guía espiritual
del establecimiento educacional, sustraía constantemente de
la sala de clases a una de las niñas para cometer los abusos
entre los años 2007 y 2012.
Se ha desestimado otra
acusación por falta de pruebas
La Fiscalía pide una
pena de 10 años de presidio por el delito acreditado, por
los ilícitos imputados, mientras que
su defensa solicita una
sentencia de tres años de libertad vigilada aduciendo
a su actitud de colaboración con la investigación.
Durante las jornadas
en que se prolongó el juicio, el sacerdote mantuvo su
derecho a guardar silencio ante los magistrados, actitud que
fue criticada por la acusación. Su silencio se rompió sólo
con la frase "Dios dirá", este martes, al ser abordado por
los periodistas.
El caso
se conoció en julio de 2012 cuando la familia de una alumna
del Colegio Cumbres presentó una denuncia contra O'Reilly,
en aquel momento asesor
espiritual y capellán del centro educativo. Esa
primera denuncia corresponde a una niña, quien entre marzo
de 2010 y julio del 2012 fue supuestamente sometida a
tocamientos de connotación sexual por parte del religioso.
Meses después se sumó otra acusación referida a la hermana
mayor de la primera niña, que fue desestimada por el
tribunal.
Suspendido de sus
actividades en 2012
El sacerdote fue
suspendido el 25 de julio de 2012 de sus labores tras las
denuncias, mientras el arzobispo de Santiago y presidente de
la Conferencia Episcopal en Chile, Ricardo Ezzati, confirmó
la apertura de una investigación canónica por las denuncias.
El Colegio Cumbres, del acomodado sector santiaguino de Las
Condes, suspendió de todas las actividades al sacerdote
hasta que se aclararan los hechos.
El tribunal fijó para
el próximo 11 de noviembre a las 16.00 horas (19.00 GMT) la
lectura de la sentencia contra O'Reilly, para quien la
Fiscalía pidió una pena de diez años y un día de prisión,
reconociéndole "una
intachable conducta anterior".
La defensa pide el
beneficio de la pena remitida al patronato de reos, sin
pasar por la cárcel
La defensa, por su
parte, pidió que se le considere también su colaboración en
la investigación y el hecho de que el Estado le otorgó hace
unos años la nacionalidad chilena por gracia; en ese marco
solicitó para él presidio menor en su grado máximo, que
tiene un tope de cinco años de prisión, pero con el
beneficio de la pena remitida al patronato de reos, sin
pasar por la cárcel, o de lo contrario, tres años y un día
de libertad vigilada. La Fiscalía no solicitó la prisión
preventiva para el sacerdote, al que se le mantendrá la
medida cautelar de arresto
domiciliario nocturno hasta que se lea la sentencia.
Tras conocerse la
declaración de culpabilidad, el Arzobispado de Santiago
manifestó este miércoles su solidaridad con la menor de edad
víctima de los abusos y valoró la acción de la justicia. En
un comunicado, el arzobispado expresó, asimismo, que "la
Iglesia sufre un enorme dolor porque se haya producido esta
situación en el seno de una comunidad cristiana y que un
sacerdote sea culpable".
"Vaya
una palabra de animación tanto a los sacerdotes como a la
comunidad de los Legionarios de Cristo, para que continúen
con su tarea de poner a Cristo como el centro de su misión y
a la Virgen como Madre", subrayó la nota.