Exige "un
reconocimiento público de la horrible gestión realizada por
el Obispado de Bilbao en este caso y una rectificación por
parte del señor Mario Iceta, no solo oral, pastoral, sino
también pública y oficial”.
Piden al Papa que
reabra una investigación que considera "tramposa" y sin las
garantías jurídicas que en cualquier Estado de Derecho deben
cumplirse y que en el caso que nos ocupa han sido
ampliamente vulneradas"

El padre del menor víctima de abusos en Gaztelueta dice que
su hijo"está mal"
“Queremos solicitar del Santo Padre un nuevo capítulo de su
misericordia para que reabra el caso, ya que es evidente que
cualquier investigación que se haya desarrollado carece de
cualquier rigor jurídico y de transparencia”. Así se expresa
la familia del joven que ha denuncia ser víctima de
supuestos abusos sexuales por parte de un profesor del
colegio Gaztelueta, en Bizkaia, y que en un comunicado carga
contra la actuación del Obispado de Bilbao por su
comportamiento "esquivo" y "sospechoso de parcialidad".
El caso,
que ha sido archivado por el Vaticano, está siendo
investigado por la vía penal en un juzgado de Getxo. La
familia, en un duro comunicado, reclama al Papa Francisco
que reabra el caso.
Los padres del
chico de 19 años denuncian de esta manera el
comportamiento "esquivo, apastoral y presuntamente
sospechoso de parcialidad del obispo de la Diócesis de
Bilbao, don Mario Iceta". Los padres del chico denuncian que
"en todo este tiempo nunca colaboró con la familia, siempre
se mantuvo al margen, conociendo esta tragedia en la piel de
uno de sus feligreses y sus padres. Nunca les telefoneó para
simplemente hacerles llegar respeto, solidaridad, afecto,
cercanía, caridad y misericordia”.
"En todo este tiempo
nunca colaboró con la familia, siempre se mantuvo al margen,
conociendo esta tragedia en la piel de uno de sus feligreses
y sus padres. Nunca telefoneó a los padres para simplemente
hacerles llegar respeto, solidaridad, afecto, cercanía,
caridad y misericordia. Es más cuando el padre de familia
hizo publica la ausencia del Obispo en el curso de esta
historia, Iceta a través de una persona de la
Diócesis pretendió que el padre le pidiera disculpas
mediante una carta", asegura la familia.
"No ha existido
investigación"
“La investigación realizada por
la Congregación para la Doctrina de la Fe ha determinado que
los hechos denunciados 'no han sido probados y, en
consecuencia, se debe restablecer el buen nombre y la fama
del acusado, sin que proceda adoptar, ulteriormente, ninguna
otra medida en relación a la citada persona'”. Con esa
lacónica conclusión, el Vaticano cerró el caso de presuntos
abusos a un menor en el colegio Gaztelueta, gestionado por
el Opus Dei en Bizkaia.
La
familia, que envió una carta al Papa Francisco explicando su
situación, reclaman de nuevo su actuación: han solicitado la
nulidad del proceso emprendido y ya cerrado por parte del
dicasterio para la Congregación de la Doctrina de la Fe. A
su juicio, "no les consta que haya existido ni investigación
ni algo que se le parezca siquiera de lejos, teniendo en
cuenta que salvo esa tramposa toma de contacto, no ha
existido ningún otro tipo de mediación contacto con la
familia".
De
hecho, afirman que solo se le tomó declaración a su hijo,
sin que estuviera presente la abogada de la familia, y sin
que hayan podido incorporar otro tipo de pruebas periciales
a la causa abierta por el Vaticano. "Mediando engaño y con
la ausencia forzosa de la letrada de la familia, esa
declaración estaba viciada de raíz y la familia manifiesta
que no la reconoce ni acepta como tal, y no por lo que en
ella se manifestó, sino más bien por el respeto
irrenunciable a unas garantías jurídicas que en cualquier
Estado de Derecho deben cumplirse y que en el caso que nos
ocupa han sido ampliamente vulneradas", se afirma en el
comunicado.