Prisión para la madre de la
menor de 11 años víctima de supuestas agresiones sexuales de su padre
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El visionado de las imágenes
intervenidas ha llevado al juez a imputarla por su presunta
participación en los hechos, que habrían sido grabados por la pareja
Las imágenes intervenidas por la Guardia Civil
han dado un nuevo giro a la investigación sobre las agresiones
sexuales sufridas por una menor de 11 años. Tras la detención como
presunto autor de su padre, que se suicidó el viernes en el módulo de
aislamiento del centro penitenciario de Alhaurín de la Torre, el juez
que lleva el caso imputó también a la madre por su supuesta
participación en los hechos y ordenó su ingreso en prisión, según
confirmaron a SUR fuentes judiciales.
En febrero, cuando se arrestó al progenitor,
agentes de la Benemérita realizaron un registro en el domicilio
familiar en busca de pruebas. Los investigadores intervinieron
ordenadores y varios discos duros, ya que al parecer las agresiones
sexuales habían sido grabadas. Inicialmente, no pudieron acceder al
contenido de los equipos debido a su nivel de ‘encriptación’. Los
dispositivos informáticos fueron analizados por agentes especializados
en delitos tecnológicos de Málaga y Madrid, que tampoco consiguieron
desbloquear el cifrado de seguridad instalado en los soportes. Hubo
que recurrir a una empresa externa para extraer los archivos que
almacenaban (varios terabytes), muchos de ellos de contenido sexual.
El visionado de esas imágenes, que se produjo
hace algo más de un mes, llevó al titular del Juzgado de Instrucción
número 1 de Málaga –que dirige las pesquisas del caso– a imputar a la
madre de la menor por su presunta participación en los hechos
investigados, según informaron fuentes judiciales. Tras interrogarla,
el magistrado la envió a prisión, donde ya se encontraba encarcelado
su marido como principal responsable de las supuestas agresiones
sexuales.
La imputación de la mujer supuso un giro para
la investigación, ya que inicialmente ella se presentó como víctima de
una situación de «absoluto sometimiento» por parte de su marido, que
según ella la amenazaba constantemente. De hecho, en un primer
momento, la Guardia Civil llegó a activar el protocolo urgente ante un
posible caso de violencia machista para que se adoptara medidas
cautelares que protegieran a la mujer.
Regreso a la cárcel
Otras
fuentes consultadas apuntaron incluso que, durante la instrucción del
caso, la ahora imputada presentó una denuncia por malos tratos contra
su compañero sentimental, motivo por el que el individuo retornó a la
cárcel de la Alhaurín de la Torre, ya que anteriormente había sido
trasladado a la de Huelva por razones de seguridad. Esta semana iba a
ser evaluado por especialistas en psiquiatría en la Ciudad de la
Justicia de Málaga.
Los
responsables del centro penitenciario malagueño le asignaron una celda
en el módulo de aislamiento «para protegerlo del resto de reclusos»,
como informó el sindicato de prisiones Acaip. El viernes pasado, sobre
las 16.45 horas, unos funcionarios lo encontraron ahorcado. Sus
esfuerzos para reanimarlo fueron en vano. Ya había fallecido. Fuentes
judiciales aseguraron que, ahora, la causa sigue adelante contra su
mujer.