La Voz de Galicia
 

Cuestionan ahora si los abuelos de Asunta murieron por causas naturales

Un alto cargo de la Guardia Civil asegura que están «echando la vista atrás». Los padres llegaron poco antes de las once al registro de domicilio de Doutor Teixeiro, donde entraron entre gritos de «asesinos, asesinos». La madre declarará mañana ante el juez. 

M. Cheda / X. Melchor / N. Mirás

Santiago  26 de septiembre de 2013

 

En el quinto día de investigación de la muerte de Asunta Basterra, la niña de Santiago encontrada sin vida el domingo de madrugada en una pista de Teo, la Guardia Civil mantiene como principal la hipótesis de que el caso se trata de un homicidio con móvil económico, concretamente, relacionado con la herencia de los abuelos de la pequeña. «Pero todas las demás líneas están abiertas aún», se apresura a aclarar un alto cargo del instituto armado que, motu proprio, añade: «E incluso estamos echando la vista atrás».

Esa última frase significa que los investigadores están cuestionándose ahora si los padres de Rosario Porto, la madre de la menor supuestamente asesinada, fallecieron o no realmente por causas naturales, como se creyó en su momento. Ella, la profesora universitaria María del Socorro Ortega Romero, dejó este mundo el 11 de diciembre del 2011 y él, el abogado compostelano Francisco Porto Mella, hizo lo propio poco después, el 26 de julio del 2012. Muy vinculados a su única nieta, Asunta, ambos fueron incinerados.

En paralelo a los trabajos para esclarecer este asunto colateral, hoy los responsables de la investigación prevén realizar nuevos registros, esta vez en el Ensanche de Santiago: uno en el piso de República Argentina donde reside Alfonso Basterra, padre de Asunta, y otro en el de Doutor Teixeiro donde vive Rosario Porto. Los dos progenitores permanecen detenidos, imputados por el homicidio de la cría de 12 años. Aunque inicialmente estaba previsto que la madre pasase a disposición judicial hoy a las cuatro de la tarde, el juez ha decidido modificar la agenda y la declaración de Rosario Porto se pospone hasta mañana. El objetivo de esta decisión es dar tiempo a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado a que finalicen el atestado, toda vez que el instructor prefiere contar con él a la hora de llevar a cabo el interrogatorio.

REGISTRO

Los padres de Asunta fueron conducidos esta mañana, pocos minutos antes de las once de la mañana, al domicilio de la calle Doutor Teixeiro, en Santiago, donde los investigadores procederán a un nuevo registro. Rosario Porto estaba mucho más constreñida y agobiada que ayer, cuando llegó incluso a mostrarse riéndose con los agentes. Los vecinos los recibieron con gritos de «asesinos, asesinos».

Ayer fue inspeccionado el chalé que la familia tenía en Teo en busca de pruebas del homicidio y, tras siete horas de registro, el padre, Alfonso Basterra, fue detenido acusado de homicidio, un día después de que ya lo hubiera sido su ex esposa, Rosario Porto.

Delante del domicilio una mujer que se presentó como familiar de Rosario Porto mostró dudas, en línea con la investigación de la Guardia Civil, sobre el fallecimiento de los padres de Rosario Porto. «Tendo dudas al ver lo que hizo con la niña. Los padres estaban bien, fueron para la cama y ya no se levantaron».