
Padre que denunció a su expareja por
maltrato infantil terminó detenido
26/05/2016

El padre y la menor acudieron ante las
autoridades para denunciar el caso de maltrato infantil en Quito.
Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
Sara Ortiz 25 de mayo de 2016 16:39 “Pase
lo que pase, suceda lo que suceda, mi hija está de por medio”,
dijo Francisco A., seguro de que hacía lo correcto al denunciar a
su expareja por golpear a su hija de 12 años. La niña tenía
moretones en las piernas a causa de latigazos producidos con el
cable del cargador de un celular. La pequeña aseguró que su madre
fue quien la golpeó la noche del lunes 23 de mayo y que no era la
primera vez que lo hacía. Francisco también reveló que su
exconviviente era una “mujer maltratadora”. Y que en otras
ocasiones había golpeado a la niña con palos, mangueras de agua,
con golpes en la cara o cualquier objeto que tenía cerca, desde
que era una bebé. “Me llamó mi hija llorando, y a mí me duele
mucho lo que le pasa. Ya no podía permitir que esto pase de nuevo.
Incluso hablé con una psicóloga y me aconsejó que denuncie a la
madre de mi hija”, dijo el padre. Él reconoce que las anteriores
veces, cuando le llamaba su hija llorando, él solo trataban de
consolarla y le pedía que se “portara bien” y no hiciera enojar a
la madre. Pero en esta última vez, la niña le dijo que ya no
quería vivir con su mamá y que incluso pensaba escaparse de la
casa. Esa promesa preocupó al padre y por eso acudió a la Dinapen
(Dirección Nacional De Policía Especializada Para Niños, Niñas Y
Adolescentes) en busca de ayuda. Sin embargo, al denunciar, el
padre se exponía a ser detenido pues en su contra existe una
boleta de apremio por deudas en la pensión alimenticia. El agente
de la Dinapen le explicó que el momento que él pida la detención
de la mujer él también sería detenido y que su hija quedaría al
cuidado de familiares. Pero al hombre no le importó. “Mi hija es
más importante que cualquier cosa y quiero que no sea más
golpeada”, dijo. El examen médico legal de la niña detalla que
sufre maltrato físico y psicológico. La niña casi no habla, tiene
malas notas en el colegio y es tímida. Los golpes que sufrió le
causaron heridas que según el perito corresponden a cuatro días
para imposibilidad en el trabajo, es decir que tardarán cuatro
días en sanar. Esta tarde, la Dinapen realizó un operativo para
detener a la madre, pero en lugar de eso el único detenido fue el
padre quien denunció. Al parecer, el problema fue que la niña
había sido golpeada hace más de 24 horas y ya no aplicaba la
flagrancia. Es decir, que al pasar este tiempo, el Código Integral
Penal detalla que las personas sospechosas no pueden ser detenidas
sino que se debe iniciar una investigación. La mujer al notar la
presencia de la Policía en la puerta de su casa tomó una actitud
violenta. La niña, que se encontraba en el patrullero junto con su
papá parecía nerviosa. Gabriel Arellano, agente de la Dinapen,
aseguró que la custodia de la menor iba a ser retirada de la madre
y entregada a su familia ampliada. “Lo importante es precautelar
la seguridad de la niña”, dijo. Al final, la madre se quedó en la
casa, mientras que el padre fue detenido.
JUEVES 26 DE MAYO DEL 2016