La Guardia Civil
ha detenido a Rosario Porto Ortega, la madre de
la niña hallada muerta cerca de Santiago en la madrugada
del domingo en una pista forestal, según han
confirmado a este periódico fuentes policiales. La
mujer, abogada de profesión y cónsul de Francia en
Santiago hasta el año 2006, ha sido
trasladada al Cuartel de la Guardia Civil de A Coruña.
Las mismas fuentes policiales han señalado que la
detención de Rosario Porto es de momento para tomarle
declaración y aclarar ciertas incongruencias de su
primer testimonio ante los investigadores.
EL PAÍS ha tenido
acceso a la declaración prestada por la madre de la niña
el día de su desaparición. La progenitora de la pequeña
Asunta B. se presentó a las 22.31 del pasado día 21 en
la comisaría de policía de Santiago de Compostela (A
Coruña) y declaró que horas antes se había ido de su
casa dejando a su hija haciendo las tareas escolares,
mientras ella realizaba unas gestiones. Se marchó sin
cerrar la puerta con llave.
Rosario explicó
que regresó a casa a las 21.30 de la calle del Doctor
Teijeiro comprobando que la puerta se encontraba cerrada
con llave y la alarma del inmueble conectada. Según
ella, la vivienda estaba en perfecto estado. Nada le
causó extrañeza porque su ex marido vive muy próximo a
su casa, (escasos 25 metros) y su hija solía ir
frecuentemente al domicilio de él, con el que tanto la
niña como ella “tienen muy buena relación”.
Llamó a su ex
marido pensando que su hija pudiese estar con él. El
matrimonio esperó “un tiempo prudencial”, según la madre
de Asunta, y al ver que esta no regresaba a su
domicilio, se pusieron en contacto con varios conocidos
y amigos de la niña, sin hallar rastro de ella.
La madre de la
menor dijo que nunca había tenido ningún problema con la
niña, con la que tienen una relación excelente y tampoco
tienen conocimiento de ningún problema en el centro
escolar. Añadió que la chiquilla nunca salía de casa
sola, resaltando que solo durante las pasadas fiestas de
la Ascensión salió con una amiga hasta las 20.30.
Según la madre,
“lo único extraño que sucedió en su domicilio, es que a
mediados del mes de julio, en que por descuido dejó las
llaves de su piso puestas cuando regresó a su domicilio
y que sobre las 02.30 escuchó a su hija dar gritos, por
lo que se levantó de cama pudiendo comprobar cómo había
un varón, de aproximadamente 1.60 m. de estatura,
complexión fuerte, vestido de ropa oscura, y con guantes
de látex". El presunto intruso huyó por el pasillo,
mientras ella intentaba agarrarle, sin conseguirlo. No
obstante, no notó en nada en falta en la casa ni dinero,
ni llaves, ni ningún efecto. Rosario Porto explicó que
no presentó denuncia sobre ese incidente "porque no
quería causarle ningún tipo de trauma a su hija”.
La detención de la
madre de la niña esta mañana para ser interrogada
sorprendió a sus más cercanos. Cuando los medios de
comunicación empezaron a hacer público el arresto, justo
cuando acababa de terminar la ceremonia de cremación del
cadáver en la más estricta intimidad, la portavoz de la
familia, la periodista Tereixa Navaza, mostraba su
sorpresa porque, relataba, acababa de ver marchar a
Rosario Porto sin ninguna presencia policial. El funeral
se oficiará esta tarde a las 20.30 horas en una iglesia
cercana al domicilio familiar de la pequeña fallecida en
el centro de Santiago.