Amnistía Internacional denuncia el uso de aceite de palma por grandes empresas que contribuyen al trabajo infantil y a condiciones miserables para otros trabajadores

En un comunicado de Amnistía Internacional se informa que el aceite de palma es una materia prima cuya demanda es masiva debido a su uso en una gran diversidad de productos básicos, desde el helado y el chocolate hasta el champú, pasando por el dentífrico, cuyo uso las empresas justifican diciendo que el aceite de palma es "sostenible", lo que significa que es ecológico y que los trabajadores reciben un trato justo. Sin embargo, una investigación promovida por Amnistía I. ha revelado que algunas de las mayores empresas del mundo, como Colgate, Nestlé y Unilever, contribuyen al trabajo infantil y a condiciones miserables para otros trabajadores y trabajadoras en las plantaciones de aceite de palma, cometiéndose abusos en las plantaciones de las empresas certificadas como "sostenibles", dándose la circunstancia de que incluso las marcas que llevan la etiqueta "sostenible" o "aceite de palma certificado" podrían estar consintiendo abusos contra los derechos humanos, concluye la organización.