Público
https://blogs.publico.es/strambotic/2019/03/fiesta-de-la-varicela/
STRAMBOTIC
El gobernador de Kentucky lleva a sus nueve hijos a
una "fiesta de la varicela" para que se contagien
Con nueve basta.
21 de marzo 2019
“Encontramos que un vecino tenía varicela.
Fuimos, me aseguré de que cada uno de mis hijos estuviera expuesto y se
contagiaron. Estuvieron mal unos cuantos días y ahora ya están bien”. Las
palabras de Matt Bevin, a la sazón gobernador republicano de
Kentucky, han puesto los pelos de punta al estamento médico de Estados
Unidos por el aliento que supone al movimiento antivacunas, que ya
tiene un notorio valedor en la Casa Blanca.
Al parecer, Bevin y su mujer, Glenna,
acudieron a una de las llamadas “fiestas de la varicela” con sus nueve hijos
de entre 5 y 16 años. Las “fiestas de la varicela” son reuniones en las que
niños afectados con la enfermedad comparten piruletas, vasos y cubiertos con
otros niños sanos con el objetivo expreso de contraer la enfermedad y así
evitar las diabólicas vacunas que, como bien sabe Donald Trump,
provocan autismo.
El gobernador Bevin es de la opinión de que son los
padres y no el gobierno quien debe decidir si vacunar a sus hijos: “Esto es
América -afirmó- El gobierno federal no debería obligar así a la gente”.
Los médicos del país se han manifestado unánimemente
contra la práctica de las “fiestas de la varicela” por ser “insegura” y
“necia”. Actualmente, 36 estados de EE.UU. exigen que los menores reciban
las vacunas contra la varicela antes de iniciar la escuela, aunque 17 de
ellos, incluido Kentucky, permite excepciones por razones médicas,
religiosas o filosóficas.
“Soy monguer, ¿qué pasa?”
La varicela es una enfermedad muy contagiosaque
provoca picor, fiebre, dolor de cabeza, agotamiento y unas características
manchas rojas que se convierten en ampollas. Aunque en principio es menos
peligrosa que la viruela -con la que se confundió al principio de ser
descubierta- las complicaciones pueden ser terribles. Como muestra sirva
este hilo
de Twitter en el que una madre relata las consecuencias que tuvo no
vacunar a su hija (spoiler: no fue por voluntad sino por ¡consejo médico!):
|