Personas que sobre
las cinco de la mañana del domingo andaban por la calle Marina
Española, en Lugo
ciudad, empezaron a oír gritos y una voz infantil que
llamaba a su madre. Finalmente, se dieron cuenta de que la
voz era de un niño que estaba dentro de un coche, que tenía
un poco bajada una de las ventanillas. Una joven, aprovechando que
una ventanilla no estaba cerrada del todo, logró meter la mano
dentro y abrir la puerta. Así consiguió sacar al niño, de
unos dos años, y calmarlo.
Poco después
llegaron miembros de la Policía
Nacional y Policía Local. Los padres fueron localizados
en estado de embriaguez. Fueron identificados y se les
informó de que se trasladarían diligencias al juzgado por su
conducta.
No obstante, el
menor se quedó con sus padres, ya que la madre parecía tener unas
condiciones mejores que la del padre. La pareja y el hijo,
residentes en Lugo, volvieron a casa en taxi y el
coche quedó en el sitio donde estaba aparcado, según explicaciones
de la Policía Nacional.