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Cuando las familias sí dejan ver 'El juego del calamar' a sus hijos
pequeños: "Mejor acompañarles, es inevitable que les llegue"
YOUNGKYU PARK / NETFLIX / EFE
'El juego del calamar'
Lolita Berenguer, Redacción 20 minutos
18 de octubre 2021
"¿Quién ha visto 'El
juego del calamar'?", preguntó M. S. maestra en un colegio
público de Valencia en su clase de tercero de Primaria
(ocho y nueve años) la semana pasada. Para su sorpresa, de los once alumnos
que tiene, nueve ya la habían visto y, de estos, "solo cuatro junto
a sus padres. El resto, con los hermanos mayores o extractos que
circulan por las redes sociales".
El último
fenómeno de
Netflix, que
se ha convertido en su estreno más visto, es el tema de conversación
entre pequeños, adolescentes y adultos de los últimos días. Hasta
los recreos de los colegios ha llegado la versión sanguinaria que
la serie hace de los juegos infantiles de toda la vida. De
forma figurada, eso sí. El asunto preocupa y ha llevado incluso a un colegio
de Madrid a
prohibir los disfraces relacionados con la serie para las próximas fiestas
de Halloween.
En
cambio, hay familias a las que no les parece mal que sus pequeños vean 'El
juego del calamar'. Es el caso de Gemma Jiménez, contable de Getafe y mamá
de Alejandro, un niño de 12 años "muy maduro" y "muy tranquilo". Es por ello
que le ha dejado ver la ficción, de apenas nueve capítulos. "Con cinco años
ya vio
El Señor de los anillos. Primero la vimos nosotros y pensamos que no
iba a ver nada que no hubiera visto ya con nosotros o que le fuera a suponer
un drama. Alejandro es un niño muy noble y sociable", explica.
En esta
familia, cada vez que terminan de ver una serie, película o finalizan un
libro, realizan el "momento asamblea", en el que comparten impresiones y el
padre y la madre explican a sus pequeños las situaciones reflejadas. "'El
juego del calamar' es corta, la violencia no es constante, nos
parecía que sumando todos los minutos no era tanto y que con nuestras
explicaciones lo podía ver", explica esta mamá, que en cambio está esperando
a ver 'Juego
de tronos' "porque es muy extensa y no queremos que esté ocho meses
viendo violencia".
Con ella
coincide Vanesa Piñeiro, autora del blog 'Una madre como tú', que considera
que la serie "no es para niños pero es inevitable que les
llegue, vía
memes,
Tik Tok, amigos o hermanos mayores". Ante esa situación,
explica, prefiere realizar una visualización acompañada e ir viendo si
afecta al menor y si este o esta es capaz de procesar el contenido.
Así lo
acaba de hacer con su hijo mayor, de 11 años. Para afrontar este "aluvión",
recomienda ver 'El
juego del calamar' junto a ellos e "ir parando y comentando", así como
"que los progenitores vean solos antes la serie para valorar". "Tiene
ramalazos machistas que hay que explicar, igual que hay que
poner en contexto la trama, que refleja la desesperación de personas
en una situación muy desfavorable. Ellos solos realizan una lectura
más superficial", advierte.
Como
hacen estas familias es como recomienda el psicólogo sanitario especializado
en infantil y juvenil, Jacobo Ozores Eizmendi, que hace especial hincapié en
que los preadolescentes de entre 10 y 12 años todavía tienen una
estructura cognitiva por la que no terminan de entender bien qué es real y
qué es ficción. Por ello, recomienda ver esta serie, catalogada
para mayores de 16 años, bajo la supervisión de los progenitores. "Junto al
visionado de la serie debe haber una explicación muy clara de lo que está
pasando, de lo que está mal, de que la serie es ficción y de que en la vida
real la violencia genera mucho sufrimiento, de las consecuencias de la
violencia, etc.", le contaba a
Andrea G. Bermejo.
En la
misma línea que las anteriores familias se pronuncia Eva González Mariscal,
sevillana mamá de dos y emprendedora detrás de la consultora tecnológica
Induscomp. Ella ha analizado desde la perspectiva de la educación social el
fenómeno causado por esta serie y considera que la alarma en los colegios se
ha "sobredimensionado" porque "no se ha observado en profundidad" por qué
los niños y niñas están reproduciendo ciertas escenas de 'El juego del
calamar' en los patios de los colegios.
González
Mariscal, conocida en Twitter como @mamaconvergente, expone que los
menores de 10 años no ven la serie solos "porque les resulta aburrido" o
"tienen miedo a que les dé miedo", pero que imitan sus juegos
porque les ha llegado por sus hermanos mayores o por Tik Tok -donde es
tendencia- o YouTube, pues la iconografía de la serie es muy atractiva.
Defiende que 'El juego del calamar "se ha convertido en parte de la cultura
que están manejando" no observación propia, sino por imitación y por ser
tendencia en las redes sociales.
"Es como
hace años, cuando todos sabíamos quién era la niña de 'El exorcista'
(1973) pero no habíamos visto la película porque nos daba miedo. O por lo
mismo que los niños y niñas juegan a vampiros pero no ven películas de
vampiros". En este sentido, González Mariscal cree que el videojuego
Fortnite, que "es el gran competidor de Netflix, pues cuando
saca una versión nueva caen las visitas al portal de streaming" reproduce
más violencia que 'El juego del calamar', ya que aquel es un juego en el que
"niños de entre nueve y diez años quedan para pegarse tiros entre ellos".
Esta
sevillana empezó a ver 'El juego del calamar' con su hijo de 12 años pero
"se aburrió al segundo capítulo", pero entiende que la serie llama mucho la
atención por su iconografía, como pasa con
'La casa de papel' o pasa con la figura de
Frida Kahlo, imagen que se porta muchas veces sin conocer en
profundidad su historia.
La
periodista valenciana Carla Bellveser, mamá de una niña de 15 años y un niño
de 12, cuenta que su primogénita vio la serie sola "antes de que se pusiera
de moda" y sin que ella se enterara. No le pareció mal. "La ha visto
con otro filtro, como entretenimiento, como un juego de rol. Mi
forma de verla ha sido totalmente diferente".
"Como
madre -continúa-, prefiero que me hable con libertad de las series que ve y
poder comentarlas con ella. También he recapacitado con ella sobre series
como 'Aquí no hay quien viva', para que se diera cuenta de
que hay mensajes de odio hacia los inmigrantes, que son algo que puede
suceder pero que no es normal... También hay una serie española que se llama
'Valeria', en la que un grupo de chicas está todo el rato
buscando chicos para tener sexo. Le expliqué que eso no es la vida real, que
las chicas no estamos todo el tiempo buscando novio. Por no hablar de 'Élite',
que es para adolescentes... Prefiero que hablemos para que tenga
claro qué es realidad y qué es ficción que preocuparme por cuatro
tiros un poco gores en 'El juego del calamar', que tiene un montón de
lecturas interesantes", expone.
Bellveser
cree, además, que si su hijo pequeño (de 12 años) le pidiera ver 'El juego
del calamar', le dejaría verla. "Me preocupa más un lenguaje soez,
el sexo malentendido (como se muestra en otras series), los botellones o las
irresponsabilidades que una serie que hace pensar qué haríamos en
situaciones límite", concluye.
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