James Bowen, el sintecho que encontró al
gato abandonado y herido en 2007, dice
que Bob lo apartó de las calles y de la
heroína, y que gracias a él encontró el
propósito que le faltaba en la vida.
Publicado 17 de junio 2020
Bob, el gato callejero
protagonista de una serie de libros y
películas, murió este 15 de junio a sus más
de 14 años, según lo confirmó la
editorial británica Hodder & Stoughton.
El famoso felino londinense
se dio a conocer tras su amistad con James
Bowen, un hombre sin hogar que lo encontró
abandonado y herido en 2007, cuando era
adicto a la heroína. Bowen cuidó del animal
y posteriormente decidió adoptarlo. Desde
entonces, Bob acompañó a su dueño a sus
actuaciones como músico callejero en la
capital británica y en sus turnos como
vendedor de diarios.
Rápidamente se volvieron
amigos inseparables y, según James, Bob
cambió su vida, le permitió iniciar su
camino hacia la rehabilitación y lo impulsó
a buscar un futuro fuera de las calles.
En 2012, Hodder &
Stoughton publicó el primer libro de James,
titulado 'Un gato callejero llamado Bob',
una autobiografía en la que cuenta su
relación con la mascota. El relato se
convirtió en un éxito editorial, con más de
ocho millones de copias vendidas en más de
40 idiomas. En 2016, se estrenó la película
homónima, que contó con la participación de
Bob. Una secuela de la cinta, en la que el
gato también aparecerá, será estrenada a
finales de este año.
Bob se volvió muy popular
y era reconocido en otros países, mientras
acompañaba a James a las firmas de libros y
entregas de autógrafos. Al primer libro le
siguieron 'El mundo según Bob' y 'El pequeño
libro de Bob', entre otros.
James Bowen y su gato Bob en una calle de
Londres, el 13 de marzo de 2012.
Luke MacGregor / Reuters
Respecto a la muerte de su compañero,
James reitera que Bob le "salvó la vida" y
le dio "mucho más que compañía". "Con él a
mi lado, encontré una dirección y un
propósito que me faltaba", subraya.
"El éxito que obtuvimos
juntos a través de nuestros libros y
películas fue milagroso. Ha conocido a miles
de personas, ha tocado millones de vidas.
Nunca ha habido un gato como él. Y nunca más
lo habrá. Siento que la luz se ha apagado en
mi vida. Nunca lo olvidaré", aseguró Bowen.
James Bowen y su gato Bob en una calle de
Londres, el 13 de marzo de 2012.
Luke MacGregor / Reuters