
http://www.andalucesdiario.es/ciudadanxs/el-juzgado-declara-responsable-civil-al-arzobispado-en-el-caso-romanones/
El juez declara
responsable civil al Arzobispado en el ‘caso Romanones’
Julian del Olmo
/ 8 sep 2015

El arzobispo de Granada, Javier Martínez. // CHARO VALENZUELA
Primera victoria procesal
importante de las víctimas de los presuntos abusos sufridos cuando eran
menores a manos de sacerdotes de la diócesis de Granada. El
Juzgado de Instrucción número 4 de Granada ha acordado declarar la
responsabilidad civil subsidiaria del Arzobispado de Granada en relación
a los hechos que investiga de supuestos abusos sexuales a menores por
parte de sacerdotes.
En un auto fechado este martes 8
de septiembre, al que ha tenido acceso Europa Press, el magistrado
considera que las personas imputadas, por su condición de sacerdotes,
dependían directamente del Arzobispado de Granada.
Así, señala que “precisamente
los hechos se producen por la condición de sacerdotes de los imputados,
y por el reclutamiento y aprovechamiento como monaguillo de la víctima o
víctimas en la sede y casa parroquial de la parroquia”.
La acusación particular había
solicitado en agosto pasado al Juzgado que decretara la responsabilidad
civil subsidiaria del Arzobispado de Granada. La acusación entendía que
se habían infringido varios cánones del Código de Derecho Canónico que
obligan a labores de vigilancia y control sobre los párrocos sacerdotes
de la diócesis. Entre ellos, aludía expresamente al canon 524
del citado Código, que obliga al obispo a asegurarse de que provee como
párroco a una “persona idónea”.
Además, la acusación particular
pedía que el arzobispo de Granada, Javier Martínez, fuera llamado a
declarar como testigo después de que este enviara al instructor, por
mandato judicial y tras nueve requerimientos, una copia
del expediente canónico. En esa documentación, según la acusación
particular, “se evidencia la existencia de un grupo organizado,
virulento, perfectamente conocido por el arzobispo de Granada”, formado
por diez sacerdotes y dos laicos. El escrito aludía a tres sacerdotes y
un seglar como supuestos autores de los abusos, y a otros ocho (siete
curas y un laico), como cómplices de los hechos, tal y como admite el
arzobispo en una comunicación que forma parte de la investigación
preliminar de la Iglesia.
La acusación particular se
remitía a un escrito del prelado granadino, incluido en el expediente
canónico, en el que consideraba que los ‘romanones’ formaban un
grupo “compacto, hermético y virulento” y subraya que ese
grupo, supuestamente, “cometió el delito de corrupción de menores” en la
persona del joven denunciante, “amén de los delitos de abuso sexual
continuado”.
CULPA IN ELIGENDO E IN
VIGILANDO
Ahora el juez entiende que, “por
culpa in eligendo como in vigilando y por el lugar del que parten en
relación de causalidad los actos de índole sexual que se originan desde
la parroquia”, se cumplen todos los presupuestos expuestos para la
declaración de responsabilidad civil del Arzobispado.
Según el auto “no cabe duda” de
que los imputados, especialmente al padre Román M.V.C., cabeza visible
del grupo de sacerdotes imputados, aprovechando la condición de la
víctima como monaguillo en la iglesia que regía”, contaba con
una gran “ascendencia” sobre él, invitándole a quedarse a dormir en su
casa y “a participar en actos comunales del grupo” de
sacerdotes, recoge Europa Press.
El magistrado matiza que, si bien
es cierto que la mayoría de los actos libidinosos se realizaron
en la casa de los curas, éstos se produjeron por la condición
de sacerdotes de los imputados y por el reclutamiento y aprovechamiento
de la víctima o víctimas en la sede y en la casa parroquial de la
parroquia de San Juan María de Vianney.
INCUMPLIMIENTOS DEL
ARZOBISPO
En el auto también expone el juez
que el máximo representante del Arzobispado de Granada, Monseñor
Francisco Javier Martínez, “habría incumplido con los actos de
vigilancia, policía o seguimientos necesarios y recomendados por la
Santa Sede y la Conferencia Episcopal para evitar la comisión
de unos hechos por parte de un grupo de sacerdotes además muy conocido
en una ciudad como Granada” y por el propio arzobispo.
Por todo ello, ha acordado
declarar la responsabilidad civil subsidiaria del Arzobispado de Granada
en relación a estos hechos, si bien la cuantía de dicha responsabilidad
civil se determinará en el momento procesal oportuno, según ha detallado
en un comunicado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Además, está previsto que el 15 de
septiembre la Audiencia vea el recurso planteado por las acusaciones
–particular y popular, ejercida por Prodeni– a la decisión del juez
instructor de declarar prescritos todos los delitos salvo los atribuidos
al principal acusado, el padre Román.
EL ORIGEN DEL CASO
El caso se hizo público el pasado
mes de noviembre, cuando fueron detenidos el considerado líder del
grupo, dos sacerdotes más y un profesor de Religión, que sin embargo
quedaron después en libertad con cargos, en un caso en el que estaban
imputadas inicialmente un total de doce personas –diez religiosos y dos
laicos–.
Todo se precipitó después de que
un joven comunicara por carta al Vaticano que había sido víctima
de abusos sexuales desde los 14 hasta los 17 años por parte de
este grupo de religiosos de Granada, lo que motivó que el propio Papa
Francisco le llamara para pedirle perdón y ofrecerle su apoyo. Tras la
llamada del Papa al joven, éste formalizó una denuncia ante la Fiscalía
Superior de Andalucía, que ordenó a la Fiscalía Provincial de Granada
interponer ‘ipso facto’ denuncia contra todos los implicados.
El Papa se
pronunció también coincidiendo con la salida a la luz de esos supuestos
abusos en un vuelo de regreso a Roma tras su discurso en el Parlamento
Europeo en el que señaló que “la verdad es la verdad” y “no debe
esconderse”. El ‘caso Romanones’ también provocó una imagen del
arzobispo de Granada, Javier Martínez, que se postró en el suelo ante el
Altar Mayor de la Catedral para pedir perdón por los “escándalos” que
afectaban entonces a la Iglesia.
|